y en tu risa sonaron panderetas
que secaron mis macetas,
con las lagrimitas que tú no querÃas
me he puesto el cariño al baño MarÃa
y ahora ya no hay quien me pare,
y en las noches claras baila mi figura
subido a un tablao de cubos de basura
entre las luces de los bares,
ha de ser la mala estrella
la que pegue coces si me ve de lejos,
la que arranque mi pellejo,
o tal vez la letanÃa de campanas
que toquen a muerto
cuando me mire al espejo,
pero todavÃa tengo el poderÃo
de ponerle lindes a este mar bravÃo
y a esta luna que se mengua,
de lavar heridas con solo un lamido,
de matar quimeras sin hacer ni un ruido,
de perderte por la lengua,
me estoy quedando solo,
no hay abrazos en mis brazos,
te los vas llevando todos,
me estoy quedando solo,
mas yo sigo rebañando,
de tu amor aún quedan trozos,
se hicieron para mÃ, para mÃ,
jergones de secano
que guardan mi trajÃn,
que guardan dudas como pianos,
se hicieron para ti, para ti,
las brumas que se esfuman,
y hechuras de violÃn
que son más grandes que mis dudas.